Defensora del pueblo: El Estado «no puede comulgar con quien genera inestabilidad política y se niega al dialogo»
La Defensora del Pueblo, Gabriela Ramírez, señaló que las actos violentos han vulnerado los derechos humanos de todo un pueblo.
Indicó que este organismo ha ejecutado 757 actuaciones defensoriales en todo el país durante los hechos violentos. Las mismas fueron dadas en centros de detención, centros de salud y mediaciones realizadas en focos de perturbación de la paz.
Durante entrevista en el programa Al Descubierto, transmitido en la noche de este domingo por Venevisión, Ramírez ratificó que “cuando se quiebra el Estado de derecho, se obstruyen vías públicas, se impide el paso de alimentos y medicinas a un lado del país, el Estado tiene que actuar, porque dejar de hacerlo es irresponsabilidad”.
En este sentido, indicó que el Estado “no puede comulgar con quien genera inestabilidad política y se niega al diálogo”, por ello los entes judiciales “se encuentran trabajando para que esclarezca cada caso con la mayor celeridad posible”.
Ramírez aseveró que existe una campaña de los medios privados internacionales para confundir a la opinión pública mundial que, según ella, consta en mezclar imágenes de la contención de la violencia por parte de los efectivos de seguridad con marchas realizadas en la oposición, cuando en realidad la actuación de la Guardia Nacional se ha dado en zonas de clase media alta, donde pequeños grupos de vándalos, en horas de la madrugada, atentan contra la paz de la ciudadanía.
En la entrevista, reiteró que existen tres denuncias de tortura, por las cuales han sido detenidos 17 funcionarios del orden público. “Para nosotros que tenemos la cicatriz de El Caracazo no nos interesa proteger a funcionarios que se salgan de las conquistas de la constitución del 99, como lo es el resguardo de manifestaciones sin el uso de armas de fuego”, expresó.
Ramírez explicó que otra arista de la manipulación mediática internacional ha sido la satanización de los colectivos y señaló que en el 2002 se hizo lo mismo con los círculos bolivarianos “que fueron llamados círculos del terror”, agregó.
Acotó que en el país existen colectivos que trabajan en diversas temáticas, entre ellas la cultura, la educación, la ecología y el deporte, por lo tanto, enfatizó que es un irrespeto asociar, sin pruebas, directamente estas experiencias de organización popular con hechos violentos.