Día Mundial de la Tierra, sin avances en materia climática
La creación de una Agencia de Protección al Medio Ambiente, promovida por Gaylord Nelson, senador y activista de Estados Unidos, condujo en 1970 a la celebración del Día Mundial de la Tierra cada 22 de abril
La creación de una Agencia de Protección al Medio Ambiente, promovida por Gaylord Nelson, senador y activista de EstadosUnidos, condujo en 1970 a la celebración del Día Mundial de la Tierra cada 22 de abril, y a las primeras aprobaciones de leyes relacionadas con el aire limpio, agua limpia y conservación de especies en peligro de extinción que para ese entonces parecía imposible.
A partir de ese logro se reflexiona en esta fecha sobre la construcción de una Tierra mejor, sin embargo, los problemas en materia climática continúan tan latentes como antes. Los avances son pocos pese a la enorme cantidad de encuentros internacionales realizados en los últimos años. Diego Díaz, presidente de Vitalis, sugiere que “menos cumbres y más compromisos objetivamente auditables” acompañados de medidas desarrolladas continuamente para alcanzar estándares de calidad y evolución delinearían un camino al cambio.
La Organización No Gubernamental, en su portal web oficial, dibujó el panorama que afecta a la Tierra después de 44 años de ser decretado su día. En cifras detalló: más de 20 millones de hectáreas de bosques se pierden por prácticas forestales destructivas; al menos 15 de los 24 servicios ambientales que mantienen la economía del mundo son forzados más allá de sus límites de sustentabilidad; y 41 mil 415 especies están en la Lista Roja de la Unión Mundial para la Conservación de ellas, 17 mil son consideradas en peligro de extinción.
A los problemas se unen que el 33 por ciento de los ecosistemas naturales han desaparecido y más del 50 aumentó la presión sobre la Tierra. Los números no son alentadores, solo evidencian que aún resta mucha tarea por hacer, entre ellas romper la percepción de que el mejoramiento ambiental representa un costo para comenzar a convertirlo en una inversión de donde incluso se pueden extraer recursos potenciales y materia prima.