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Dólar paralelo rebasó los 600 bolívares

La tarde de este jueves el dólar paralelo rebasó la barrera de los 600 bolívares y se ubicó en 616,46 por dólar.

Los precios del  dólar paralelo se imponen en las casas de cambio en la frontera colombo-venezolana, en donde acuden venezolanos en búsqueda de divisas debido a la imposibilidad de obtenerla mediante el Simadi, mecanismo en vigencia desde el 10 de febrero de 2015.

El dólar tasado en el Sistema Marginal de Divisas, Simadi, cerró este jueves 9 de julio en   197,09 bolívares, de acuerdo a la información publicada en el portal del Banco Central de Venezuela.

Del total de divisas liquidadas 96,32% correspondió  a las tasas a 6,30 y 12,80; mientras que en tasa Simadi se liquidó el 3,68% restante.

Al 6 de julio del 2014, un dólar en el mercado negro estaba en 69,96 bolívares, y este martes trepó a Bs. 542,78, lo que se traduce en Bs. 472,82 más y un 675,8% en un año.

Esto ha venido ocurriendo mientras el Sistema Marginal de Divisas (Simadi),  única medida cambiaria asumida este año por el Gobierno nacional para frenar el mercado negro,  ha fluctuado entre 170,03 bolívares por dólar (al 12 de febrero pasado) y Bs. 198,56 del martes.

Es decir,  el Simadi desde su creación ha subido solo 28 bolívares. Sin embargo, el “paralelo”, que para el 12 febrero costaba  Bs. 189,55 ha ganado en el mismo tiempo  Bs. 353,36  por divisa.

Para el economista, Ramón París, este continuo aumento de la tasa del paralelo “obedece a un efecto altamente  especulativo”, porque hay elementos que no concuerdan con esa alza.

Explicó a PANORAMA que el precio colocado en la página digital “Dólar Today” se basa en la compra venta de dólar-bolívar en la frontera con Colombia; pero incluso se cotiza en sábados y domingos, cuando esas casas de cambio que operan en Cúcuta están cerradas.
Mencionó además que podría responder a la situación política; pero no hay mucha relación de cómo esa tasa crece si en el país hay procesos democráticos abiertos (parlamentarias). Un tercer elemento, es que el Estado ha venido cancelando la deuda externa.

En su opinión, “en la teoría económica  es complicado explicar esta alza del dólar paralelo”; pero si dejó claro que “en este momento  ese dólar  no tiene límites, el que especula no tiene límites”.

Precisamente, el economista José Toro Hardy  escribió en su twitter que “hasta ahora pensé que el dolar paralelo a fin de año rondaría Bs 700. Creo haberme equivocado, podría llegar mucho más alto… El pavor al costo político los tiene paralizados, el precio lo pagaremos todos los venezolanos”.

A su vez, el analista financiero, Herbert Hudde, recordó que la actividad en la frontera es donde está el origen de un dólar tan alto, sin embargo, acotó que la información obtenida allí si existe.

Insistió que “tenemos 4 mercados para comprar dólares: 3 administrados y controlados por el Gobierno: el Cencoex (Bs. 6,30), el Sicad (Bs. 12,80) y el Simadi (Bs. 198,56); y otro realmente libre que es el paralelo. El 96% de los dólares que entran al país son del Gobierno, y este los usa para importar cosas, pagar deuda, (…) dejando una escuálida suma para esos mercados que él administra”. (…)  Entonces los que no son satisfechos en esos 3 mercados, que son muchos, tienen que acudir al paralelo, donde hay una cuantiosa demanda”.

A pesar de los últimos acontecimientos en el mercado paralelo, el Gobierno nacional no ha tomado nuevas medidas cambiarias, quedando pendiente los resultados de las reuniones que  se ofreció ha realizar el Banco Central de Venezuela (en mayo) con privados para contrarrestar el mercado negro.

Luego de eso, lo que se ha conocido es la oferta de divisas a través del Sicad (sistema que no ofrecía dólares desde noviembre pasado) para sector transporte, al cual adjudicó 350 millones de dólares en junio pasado.

En medio de esta sequía de dólares oficiales cada vez hay más gente que acude al “paralelo”, para hacerse de las divisas que les permita importar desde materia prima hasta productos terminados, lo que ha llevado a una escalada de precios continuos y en consecuencia ha mermado el poder adquisitivo.

A lo que se suma una elevada inflación, la cual según el economista José Guerra  “al cierre de junio la anualizada alcanzó 120,7%  y una tasa acumulada de 68,2% hasta junio”. Cifras no oficiales, debido a que el BCV sigue sin publicar los indicadores de este año.