El defensor del Barcelona Javier Mascherano aceptó una sentencia de un año de cárcel por evasión fiscal en el marco de un acuerdo judicial, aunque es improbable que el argentino entre en una prisión.

El futbolista de 31 años, que fichó por el Barcelona en agosto de 2010, se declaró culpable el año pasado de defraudar más de 1,5 millones de euros al fisco español por ocultar ganancias de sus derechos de imagen.

En España, las penas inferiores a dos años de prisión no suelen aplicarse si el acusado no tiene antecedentes penales, destacó EFE.

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La defensa de Mascherano, ha pedido al tribunal que le sustituya la pena de prisión impuesta por otra multa de 21.600 euros, un mecanismo que facilitaría la cancelación de los antecedentes penales del futbolista, y si no es así que le libre de entrar en la cárcel.

En una situación similar se encuentra su compañero en el Barça y en Argentina, el astro Lionel Messi, que será juzgado a partir del 31 de mayo junto a su padre por un fraude fiscal de 4,16 millones de euros también relacionados con sus ingresos por derechos de imagen.

A diferencia de Mascherano, Messi no reconoció haber cometido ningún delito ante el juez, asegurando que la gestión de su fortuna corre a cargo de su padre Jorge Horacio, lo que dificulta un posible acuerdo previo al juicio.