El terror de las floristerías

La empresa YesWeCampus prepara el desembarco de miles de estudiantes que venderán rosas en Sant Jordi. 3.000 universitarios y escolares se distribuirán por Cataluña con más de 1.000 paradas, la gran mayoría —un millar— en Barcelona, según la compañía. El Ayuntamiento de Barcelona ha concedido este año 5.132 licencias para paradas de flores, un 24% más que en 2015. YesWeCampus es la red más grande de venta de flores de Sant Jordi. Su legión ya era omnipresente el año pasado en las calles de la ciudad: disfrazados, acompañando la flor con artesanías, con libros de segunda mano o con caramelos, los estudiantes están adiestrados para vender las 200 flores de media que tendrá cada tenderete. El Gremio de Floristas de Cataluña critica que el Ayuntamiento dé margen a una empresa que especula con la calle, emite publicidad engañosa y no pasa por los canales habituales del sector.

YesWeCampus ofrece empleos temporales a estudiantes para que se ganen un dinero extra, sea para una fiesta o para financiarse un viaje. La mayoría de estos conoce el servicio por el boca-oreja y por redes sociales. Los interesados asisten a una reunión de presentación del proyecto, después a una reunión de formación y finalmente a la reunión para pagar: la mayoría paga unos 350 euros por 200 rosas, el alquiler de un cubo y el porcentaje para Save the Children, entidad benéfica que este año recibirá una parte de la facturación. Los estudiantes pueden vender las rosas al precio que quieran. Sus rosas se ofrecerán con un empaquetado de cartón y podrán añadir un vale de descuento para los cines del grupo Balañá.

YesWeCampus sugiere a sus clientes —los estudiantes— maneras de hacer más atractivas las rosas: acompañarlas con manualidades o que los vendedores se disfracen. Clara Alemany vendió rosas de YesWeCampus en el Sant Jordi de 2014. Cursaba segundo de bachillerato y se enteró de la oferta por el aviso de un amigo en Facebook. Ella y una amiga pidieron tener la parada en La Barceloneta —los clientes pueden elegir el punto de venta; YesWeCampus les ayudó a gestionar la licencia con el Ayuntamiento— y se disfrazaron, una de Sant Jordi y la otra de princesa. La experiencia fue un desastre porque se equivocaron eligiendo la ubicación: los turistas no compran rosas. “Un amigo que tenía la parada en el centro y se disfrazó de pastorcillo sí ganó dinero, 100 euros”.

[TEX]Alemany explica que convenció a amigos suyos para que se apuntaran y con esto obtenía descuentos de entre 20 y 30 euros.

 

La página de Facebook de YesWeCampus asegura que el beneficio medio es de 418 euros si se compran 200 rosas y se venden a 3,5 euros la unidad. “Negocio rápido, fácil y seguro”, dice la web. Yago Zarroca es el responsable de la empresa. Inició el proyecto hace siete años implicando a amigos y lo ha hecho crecer hasta convertirlo en la red de venta de flores más grande de Sant Jordi. Zarroca no quiere decir cuántas rosas compran “porque es un dato confidencial”. Asegura que no es el principal vendedor de rosas de la diada: “Hay empresas como el Sabadell o Vueling que compran más que nosotros, para regalar a sus clientes”. Zarroca tampoco quiere precisar dónde compra las rosas. Los estudiantes debían recoger las flores entre el ayer y hoy viernes en un almacén de Molins de Rei.

Quejas del sector

Joan Guillén, presidente del Gremio de Floristas de Cataluña, considera que los beneficios que anuncia YesWeCampus son falsos. Alerta que sus rosas son de mala calidad, probablemente compradas directamente en países de América, sin que pasen por el Mercat de la Flor de Cataluña o por Mercabarna. Guillén también critica al Ayuntamiento porque no pone límite a la concesión de licencias en un día en el que la competencia desleal satura el sector.

El gremio de floristas solicita anualmente entre 200 y 250 licencias para tener paradas en las calles de Barcelona, un tercio de las que habría conseguido YesWeCampus. Guillén apunta que el gobierno municipal les había informado de que YesWeCampus recibiría entre 600 y 800 licencias.

El Ayuntamiento establece pocas condiciones para obtener una licencia. El titular ha de ser mayor de edad, no ha de tener deudas por impuestos municipales. También se aplican “unos criterios de distancia para las paradas de flores respecto a salidas de metro y floristerías”, según un portavoz del consistorio.

Zarroca confirma que el principal negocio de YesWeCampus son las rosas de Sant Jordi. “Vienen estudiantes de todas las carreras, también hay madres y abuelas. Los formamos como emprendedores. Quienes nos compran rosas son personas con ingresos medios y medio altos porque no todo el mundo puede permitirse desembolsar 400 euros”.

La antigua sociedad propietaria de YesWeCampus se declaró insolvente en 2015, según el diario Economía Digital. La Vanguardia informó en 2013 que Zarroca había creado YesWeCampus con 150.000 euros de capital riesgo facilitado por CaixaBank y el Instituto Catalán de Finanzas, entre otros.