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Preparan nuevo precio para la gasolina en Paraguachón

El presidente Nicolás Maduro informó ayer que la próxima semana abrirán 20 nuevas casas de cambio y 11 nuevas estaciones de combustible que estarán ubicadas en las zonas fronterizas que el país comparte con Colombia y Brasil.

El mandatario reiteró que actualmente están operativas tres Estaciones Especiales Exclusivas (EEE) que venden el combustible en pesos y ocho casas de cambio y que estas han resultado «un éxito total y sin precedentes que genera una economía sana». Precisó que de la oncena de gasolineras, dos estarán en Apure y una en el estado Bolívar en Santa Elena de Uairén. El resto estarán operativas en Zulia y Táchira.

El mandatario adelantó que hará ajuste al precio del combustible que se vende en pesos en las estaciones de servicio que sirven en el municipio Guajira.

«Vamos a hacer un ajuste a los precios en la frontera con Parguachón (Zulia), para mejorar los precios y así vamos a ir mejorando el servicio. Cuál es el objetivo, que no se llevan más la gasolina y el diesel de contrabando y lo vendan en Colombia», aseguró en una rueda de prensa con medios internacionales, que fue transmitida por Venezolana de Televisión.

Dijo que más temprano que tarde «se abrirá la frontera» para que los colombianos «puedan echar la mejor gasolina y diesel del mundo al mejor precio». Esto lo dijo sobre la negativa colombiana de permitir el paso de vehículos hacia Venezuela.

«Dispuesto a todo» en el diálogo

El presidente Maduro aseguró que su Gobierno está «dispuesto a todo» en la mesa de diálogo -en la que participa junto a la oposición- pero sin el establecimiento de condiciones previas, aunque asomó una posible exigencia por parte del oficialismo.

«¿Qué exige el Gobierno? Diálogo sin condiciones, es lo que exigimos, sentarnos, vernos a los ojos, conversar todos los temas sin condiciones», dijo el mandatario desde el palacio presidencial de Miraflores.

Maduro afirmó que su gobierno tiene «capacidad de diálogo y de entendimiento», así como «capacidad y flexibilidad para buscar acuerdos», ítems que, dudó, posea la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD).

Señaló además que el oficialismo no está dispuesto a ceder en el cumplimiento de la Constitución y reiteró que el diálogo «no tiene alternativa», por lo que dijo aspirar a que las negociaciones «continúen su marcha (…) para que trabajemos en función del país».

Maduro indicó antes que los acompañantes internacionales de la mesa de diálogo «ya están llegando» al país para una «sesión de trabajo bien interesante» que, afirmó, se llevará a cabo durante los días jueves y viernes.

El mandatario nacional dijo que espera lograr, mediante el proceso de diálogo una nueva Asamblea Nacional, un órgano que está controlado por el antichavismo.

Afirmó que a Venezuela le hace falta una Asamblea distinta. “Ellos creían que podían parar el país desde el punto de vista del Estado y las instituciones, pero sigue marchando (…) No me hace falta la AN, constitucionalmente. Al país le hace falta una AN distinta a esta y llegará el día en que rescatemos la AN”.

«Comentario jocoso» sobre López

El presidente Nicolás Maduro afirmó ayer que es la justicia la encargada de procesar el caso del opositor Leopoldo López, y que el ofrecimiento que hizo en 2015 sobre su liberación a cambio de la libertad del puertorriqueño Oscar López Rivera, indultado el martes por el presidente estadounidense Barack Obama. fue un «comentario jocoso».

«El caso de este señor López más allá del comentario jocoso que hice en su momento (…) está en manos de la justicia venezolana, y la justicia venezolana y la comisión de la verdad, bueno procesará ese caso y todos los demás casos y espero que haya justicia».