Félix Hernández se recuperó y salió airoso frente a los Medias Blancas
La casta de una persona, o en este caso de un beisbolista, podría medirse por la capacidad que tienen para reponerse de las adversidades.
Un ejemplo claro lo dio Félix Hernández en su apertura de ayer frente a los Medias Blancas de Chicago, a los que los Marineros de Seattle batieron 4-3.
El derecho tuvo un inicio de juego tambaleante. De hecho, el primer bateador que enfrentó, el cubano Yoan Moncada, le conectó jonrón al primer lanzamiento que realizó. Para ir un poco más allá, el segundo en el orden al bate, su coterráneo Yolmer Sánchez, tampoco esperó mucho y en el segundo pitcheo le ligó un doblete hacia el jardín derecho, para luego llegar a la goma por sencillo de Tim Anderson.
La tarde lucía larga para el Rey. Pero no fue así. Hernández reaccionó a tiempo para evitar males mayores y, a pesar de que permitió otra carrera en el tercer episodio, pudo sostener el embate de los patiblancos por 6.0 entradas completas, suficientes para que con el apoyo de su ofensiva se quedara con su tercer lauro de la naciente campaña de las Grandes Ligas.
En total, el as de la rotación de los navieros además de las 3 rayitas que recibió, toleró 7 hits, 1 base por bolas y 6 ponches, lo que hizo descender a 4.96 su efectividad, después de 6 aperturas.
Con la victoria de ayer, Hernández cortó una racha de dos presentaciones sin saber lo que era ganar, siendo la última vez que celebró el pasado 16 de abril frente a los Reales de Kansas City.
Por los patiblancos el infielder Yolmer Sánchez finalizó de 4-2, con doble y par de rayitas anotadas.
Estreno jonronero. José Altuve tuvo que esperar 18 juegos para poder conseguir su primer batazo de vuelta entera de la campaña, después de que lo hizo en el enfrentamiento de ayer, en el que los Astros de Houston derrotaron 5 a 2 a los Angelinos de Anaheim.
El estelar segunda base cerró el desafío con el jonrón como su único imparable en cuatro apariciones en el plato para que su average semantuviera en el .333, con el que comenzó la jornada vespertina.
Marwin González no corrió con la misma suerte y se fue en blanco en cuatro oportunidades frente a los lanzadores serafines.
El novato Eduardo Paredes tuvo su segundo relevo del año con Anaheim y lanzó 1.2 innings de una carrera, producto de un cuadrangular, un boleto y una base por bolas.