Famoso sacerdote chileno fue expulsado de la Iglesia por mandato del Papa Francisco
El peso de la Iglesia Católica y del Papa Francisco ha caído sobre una icónica figura del clero chileno, se trata del sacerdote, Cristian Precht, quien está implicado presuntamente en el escándalo de abusos sexuales que ha sacudido al país suramericano y que además daña la carrera de este religioso quien se enfrentó arduamente contra las tiranías de Pinochet, informó El País de España.
Entre 2012 y 2017 el clérigo había sido suspendido por conductas abusivas de esta índole y el mismo Ricardo Ezzati, arzobispo de chile, el encargado de desarrollar la medida. Ezzati también es protagonista en hechos de abuso, inclusive fue uno de los más de 30 religiosos que pusieron su cargo a disposición del máximo pontífice, quien aún no toma una decisión.
Cuatro meses después de la culminación de su suspensión cuatro miembros de la Congregación Hermanos Maristas, pusieron una denuncia contra varios sacerdotes entre esos Precht por los delitos de: asociación ilícita, violación impropia, abuso sexual impropio, abuso sexual propio y favorecimiento de la prostitución de menores. La Fiscalía abrió una investigación y el 7 de agosto la Iglesia envió los nuevos antecedentes sobre el sacerdote a la Congregación para la Doctrina de la Fe.
Bergoglio por su parte no se ha quedado de brazos cruzados y ha tomado cartas en el asunto, expulsándolo de la Iglesia, aunque para muchos esto no es suficiente. Para otros como el doctor en filosofía es un gran avance. “No será cárcel, pero que se lo expulse de cura a Precht para mí es algo de justicia. Sus abusos provocaron al menos un suicidio y mucho sufrimiento. Una familia que quiero mucho quedó sin papá, sin hijo, marido. Cuando nos creen, hay justicia. Sea quien sea. Es simple”. Sin embargo es la primera vez que el máximo líder de la Iglesia Católica toma una decisión de dichas magnitudes.
“Niego absolutamente haber participado, en forma alguna, en los hechos que calumniosamente se me imputan”, escribió en abril el acusado en una carta al diario chileno La Tercera. “Defenderé mi honra personal y ministerial por todos los medios a mi alcance y en toda instancia que aparezca vulnerada”.