Hábitos para no aparentar más edad de la que tenemos

Un reciente estudio determinó que hay dos hábitos que nos envejecen visiblemente y podría evitarse, o por lo menos no sumar un «granito más de arena».

Se trata del tabaco y el alcohol. La ciencia ahondó en las formas en las que perjudican a la salud. Pero un grupo de científicos se centró en las marcas físicas que dejan estos dos hábitos en el cuerpo y nos hacen ver más viejos. Y los resultados son sorprendentes.

Según de la revista científica Journal of Epidemiology & Community Health, consumir alcohol en exceso (más de 28 copas a la semana en mujeres) aumenta en un 33 % la probabilidad de que nuestras córneas estén rodeadas de un anillo gris vinculado a la edad, respecto de las que tomaban menos de siete.

Los hombres, tomadores de alcohol, por su parte, también aumentaban las chances de tener pliegues en el lóbulo de la oreja. El cigarrillo demostró estar asociado a estas características propias de la edad, además de provocar placas amarillentas encima de los ojos en los hombres.

«Lo interesante de los resultados es que podemos observar esos signos a simple vista, mientras que para cosas como la presión arterial alta o los niveles altos de colesterol, tenemos que hacer mediciones avanzadas para obtenerlos», dijo Janne Tolstrup, autora del estudio y directora de investigación del Instituto Nacional de Salud Pública en la Universidad del Sur de Dinamarca.