Familias de reos muertos en cárcel de Guanare acusan a las autoridades por la masacre
Varios familiares de los reos fallecidos el viernes 1 de mayo en el Centro Penitenciario de Los Llanos (Cepella) en Guanare, acusaron este sábado a las autoridades de haberlos matado, después de que la versión oficial apuntase a un intento de fuga que dio lugar a un intercambio de disparos entre los presidiarios y los funcionarios del penal.
Sin embargo, los al menos 50 muertos registrados durante el suceso eran presos y no se reportó ninguna víctima mortal de la parte de las autoridades carcelarias, informó a EFE un funcionario del centro penal de la localidad de Guanare que se encontraba trabajando en el momento en el que ocurrieron los hechos.
La actuación de las autoridades fue cuestionada también por diversas instancias internacionales, alguna de las cuales apunta a una masacre y coincide con la versión de los familiares de los presidiarios.
«Es imposible, es inaudito. Estas personas (autoridades) como actuaron con estos muchachos, los mataron a mansalva, fue una masacre lo que hicieron», dijo ante los periodistas Víctor Calderón, padre de uno de los 50 fallecidos.
El hombre explicó que este sábado recibió una llamada de los responsables de la cárcel, el Centro Penitenciario de Los Llanos (Cepella), por lo que pudo ingresar al penal en la mañana y reconocer el cadáver de su hijo a través de fotografías que le mostraron en una computadora.
Calderón ve «imposible» que lo ocurrido no acarree sanciones contra los implicados, mientras espera, al igual que decenas de familiares, a las afueras de la cárcel, le sea entregado el cuerpo de su hijo «para darle descanso».
Desmienten intento de fuga
«Los reos del Cepella fueron objeto de una masacre. Queremos desmentir ante los medios sociales que en ningún momento hubo intento de fuga», dijo, también ante los periodistas, Adriana Leandro, familiar de otro de los presos, mientras reclamaba información en las afueras del penal, en la ciudad de Guanare, en el estado Portuguesa.
La mujer desmentía así la versión de algunas fuentes militares, según las cuales se produjo un intento de fuga que fue frustrado por los custodios y que dio lugar a la violenta escena.
Marline Hernández, también familiar de una de las víctimas, coincidió en el desmentido al explicar que algunos reos protestaban el viernes por el retardo en el pase de alimentos -que regularmente llevan los familiares a los internos- cuando empezaron a disparar contra los prisioneros.
«Ayer vivimos un día de zozobra, angustia, preocupación, dolor, ver de la manera tan cruel y fría, despiadada, como asesinaron a muchos de los privados de libertad. Fue algo espantoso», relató la joven ante periodistas.
El eco de la denuncia
Varias organizaciones no gubernamentales, diputados opositores e instancias internacionales se pronunciaron por este hecho que hasta ahora ha sido confirmado a EFE por la Fiscalía de Venezuela sin que ningún otro organismo oficial ofrezca cifras de heridos o fallecidos.
«Estamos profundamente preocupados por los hechos violentos en la prisión de Guanare, en los que 46 detenidos (actualizados a 50) habrían resultado muertos y 75 heridos, incluidos autoridades del centro», expresó en Twitter la oficina de Naciones Unidas para los derechos humanos.
La ONU llamó al Gobierno a investigar, «resolver el hacinamiento y garantizar derechos básicos».
Amnistía Internacional (AI), por su parte, señaló directamente al Ejecutivo de Nicolás Maduro al culparlo por intentar «justificar la violencia empleada, declarando que se habría tratado de un intento de fuga por parte de las personas privadas de libertad».
«Las grotescas imágenes de lo ocurrido, que ahora recorren el mundo, deben servir de recordatorio de que todas las personas responsables de esta atrocidad deben rendir cuentas frente a la justicia. La respuesta letal de las autoridades debe ser investigada y analizada a profundidad», dice AI en un comunicado.