Nixon Moreno pone fin a su exilio y reaparece en Mérida
Casi 10 años, entre la clandestinidad y el exilio, terminaron ayer para el dirigente opositor Nixon Moreno. Al parecer la nueva Asamblea Nacional y la expectativa que genera la ley de Amnistía para presos y perseguidos políticos hicieron que el exdirigente estudiantil de la Universidad de Los Andes reapareciera este lunes ante la comunidad universitaria y profesores de su alma máter.
Moreno agradeció “al arma más formidable entre los pueblos: la solidaridad” y llamó a “marchar por la reconciliación nacional” con el respaldo de “un pueblo que se está negando a morir y que clama por que se consolide un proceso democrático”.
Espera que los diputados, líderes políticos y la ciudadanía sean capaces de consolidar la paz en Venezuela, “así como fuimos capaces de hacer la guerra”. “Es importante hablar del perdón”, expresó Moreno, quien abandonó el país al ser acusado de agresión sexual e intento de asesinato por una agente policial
“Yo hoy perdono a la funcionaria Sofía Aguilar (presunta víctima en su caso), a Hugo Chávez Frías, a (Luis) Tascón, a Carlos Escarrá y a tantos otros que conspiraron porque querían asesinarme”, dijo a los medios de comunicación presentes de quienes no aceptó preguntas y tras recordar el “asesinato” de su madre.
El ahora politólogo retó a Tareck El Aissami, gobernador aragüeño, a “poner un pie fuera de este país para que sea capturado como un narcotraficante y terrorista”.
Apoyo parlamentario
A Nixon Moreno lo respaldaron en su encuentro con los medios, los diputados ante la AN por el estado Mérida, William Dávila, Lawrence Castro y Luis Loaiza Rincón además de los alcaldes Omar Lares, del municipio Campo Elías, y Álvaro Sánchez, del municipio Rangel.
Dávila dijo a La Verdad vía telefónica que, el bloque de la Unidad acompaña las acciones que buscan “desarrollar todo el movimiento de masas para apoyar la ley de Amnistía y generar el ambiente favorable para que no haya ningún obstáculo por parte del Ejecutivo, para que se apruebe y se cumpla esta ley”.
El caso
Nixon Moreno fue acusado durante el gobierno del difunto Hugo Chávez por los delitos de intimidación pública, actos lascivos violentos y lesiones personales intencionales, genéricas y leves, así como por homicidio intencional simple en grado de frustración en contra de la policía Sofía Aguilar. Moreno permaneció en calidad de «asilado diplomático» en la sede de la Nunciatura Apostólica en Caracas desde marzo de 2007 hasta marzo de 2009, tras declararse perseguido por la revolución bolivariana. Un mes después obtuvo estatus de refugiado en Perú, país que abandonó al asumir el actual presidente, Ollanta Humala. En febrero de 2012, recibió asilo político de parte del Gobierno de Panamá, y en agosto el TSJ autorizó a la Cancillería iniciar un proceso de extradición.
Acción del Sebin
El abogado de Villca Fernández, exdirigente estudiantil de la ULA, alertó sobre las intenciones del Sebin de detenerlo por un supuesto mandato de conducción de la fiscalía 20 con competencia nacional.
El jurista Alonso Medina Roa, indicó que el mandato de conducción quedó sin efecto el pasado 15 de diciembre, fecha en la que Fernández acudió a la fiscalía para atender el llamado. «Estábamos a la espera de una situación de la fiscalía, que no se pronunció, me imagino, que por el trabajo de ellos. No hay contumacia por parte de Villca», indicó el defensor.