Madres de presos políticos esperan que el diálogo dé frutos

“Sabiendo que la Unidad Democrática está compuesta por partidos amantes y defensores de la libertad y de los derechos humanos, me parece lógico que uno de los puntos principales para comenzar a dialogar con un gobierno antidemocrático sea precisamente la liberación de todos los presos políticos, que hoy sufren el maltrato y las torturas de los órganos de seguridad del Estado”, afirma Antonieta Mendoza de López, madre de Leopoldo López.

AYATOLA NÚÑEZ 

Asegura que la “única alternativa y la más poderosa” para que salgan en libertad es el pueblo. “Cuando a mi hijo lo sentenciaron injustamente, él se paró delante de la juez y le dijo con mucha firmeza y coraje: “Estas esposas que hoy me pone usted no me las quitará el sistema de justicia corrupto, sino el pueblo venezolano”.

El dirigente de Voluntad Popular, sentenciado el 10 de septiembre de 2015 a 13 años, 9 meses y 7 días por los hechos que ocurrieron el 12 de febrero de 2014, cumple su condena en la cárcel militar de Ramo Verde. Durante el tiempo que ha permanecido preso su familia ha denunciado ataques en su contra.

De hecho, permaneció 170 horas incomunicado y fue el viernes pasadocuando sus allegados y abogados pudieron verlo. Pese a ello, su madre asegura que está “fuerte de ánimo, fuerte físicamente y fuerte espiritualmente”.Explica que quienes más sufren son sus nietos Manuela y Leopoldo Santiago.

“Por eso admiro tanto a Lilian, porque ella ha tenido que asumir el doble papel de padre y madre”. Y como madre pide justicia no solo para su hijo, sino también para todos los presos políticos y sus familias, que “sufren las consecuencias de un sistema de justicia al servicio de un partido político”.

“Tengo la esperanza de que el gobierno recapacite”

Yamile Saleh, madre de Lorent Saleh, no rechaza el diálogo entre el gobierno y la oposición. Confía en este tipo de negociaciones para la resolución de cualquier conflicto y respalda que una de las exigencias irrenunciables de la oposición sea la liberación de los detenidos por razones políticas.

“En este momento le doy un voto de confianza al diálogo porque está un representante del papa Francisco y soy una mujer de fe. También hay una comunidad internacional observando todo”, señala.

Denuncia que su hijo, detenido desde hace más de dos años y que se encuentra recluido en el Helicoide, estuvo preso en la Tumba, en el Sebin de Plaza Venezuela, donde fue torturado. Por esa razón asegura conocer muy bien lo que el gobierno es capaz de hacer.Agrega que Lorent ha sido sometido a situaciones como aislamiento total, violaciones de derechos humanos y al debido proceso.

“Lo quisieron enloquecer porque no acusaba a líderes nacionales. Un día antes de sacarlo de la Tumba lo golpearon, y no me lo pueden negar porque yo vi los golpes”,afirma.

Aun así, apoya las reuniones en las que participan el Ejecutivo y la Mesa de la Unidad Democrática: “Con todo ese sufrimiento apuesto por el diálogo porque es lo más sensato. No es amistad con el gobierno, pero vamos a conversar. Si ellos son los que no van a respetar, el mundo los juzgará”.

Sin embargo, espera un gesto mayor del presidente Nicolás Maduro. “Tengo la esperanza de que el gobierno recapacite. Ellos saben que los ojos del mundo están sobre nosotros.

Tengo toda mi confianza puesta en Dios para que 2016 culmine sin presos políticos”.

“Quisiera sacarlo de la cárcel con mis propias manos”

El diálogo le genera dudas a Ingrid Flores, madre de Rosmit Mantilla, diputado suplente a la Asamblea Nacional y activista de derechos de la comunidad sexodiversa. Por una parte considera que es el mecanismo más idóneo ante la crisis que vive el país, pero cree que la oposición está en desventaja debido a que el gobierno sigue sin dar muestras de que cederá en alguna de sus posiciones. No obstante, espera que se den las condiciones para que se concrete la libertad de los presos políticos.

“Esa es mi esperanza como madre y como venezolana. Espero que el diálogo sea de verdad para que salgan en libertad a todos los jóvenes detenidos injustamente. Me gustaría que esta Navidad mi hijo estuviera conmigo”,expresa.

A Flores le es difícil ocultar la rabia y la indignación que le causa la situación que atraviesa su hijo: “Quisiera tener más fuerza, quisiera ir a la cárcel donde lo mantienen preso a sacarlo con mis propias manos y liberarlo de esos inescrupulosos. El dolor es indescriptible”.

Mantilla fue elegido diputado el 6 de diciembre y no ha podido juramentarse. Está preso desde 2014 en el Helicoide por su presunta participación en las protestas de ese año.

La madre desconoce el porqué del ensañamiento contra su hijo. El 31 de octubre estaba programada una cirugía para retirarle al joven múltiples cálculos de la vesícula. Sin embargo, en vez de seguir la orden que emitió la juez aprobando su intervención inmediata, fue sacado de la clínica y puesto en una celda de castigo. “Desconozco su estado de salud y estoy muy angustiada porque no lo he podido ver. La Navidad y el Día de la Madre ya no son lo mismo sin él”.