Teatro Esencial Sileo, el renacer del teatro
Una plaza. Un ambiente. Una fuente, agua. Gente, vendedores, niños. Árboles. Una estructura. Música. Motociclistas. Sillas vacías. Poco a poco todo toma figura. Las sillas vacías desaparecen y en su lugar la gente las llena. Algunas ávidas, otras curiosas. Otras, solo ven. Así con el encendido de la música inicia una obra más de las que conforman el Festival de Teatro Esencial 2017 por la celebración del primer aniversario del Teatro Esencial Sileo.
Este grupo actoral nace de cuatro jóvenes egresados de la Escuela de Teatro Esencial. Sileo es una agrupación de teatro que cumple con la filosofía del Teatro Esencial. Está compuesto por cuatro jóvenes, el más joven es Ángel Eduardo Marín su director con 17 años quien heredó de su papá Eduardo Marín el amor hacia ese lugar para mirar: el teatro. Él junto a Michael Molina, Melissa Escalona e Ismenia Juárez tomaron las riendas de esta nueva propuesta.
Michael Molina, uno de sus integrantes comenta lo que representa para él, este primer año de trabajo en Sileo. “Siempre estamos haciendo presentaciones en la calle, manteniendo una programación, cada 15 días se arma el Teatro Rubino, una estructura que se arma y desarma en la calle que sirve como escenario para todas las puestas artísticas. Todo esto se lleva a cabo en las plazas y calles más transitadas de Maracaibo. Estamos probando con este festival a ver cómo nos va para ampliar las presentaciones. La premisa del grupo de teatro es acercar el teatro a la gente para que la gente se acerque al teatro”.
Filosofía
La Escuela Teatro Esencial es una corriente del teatro, una forma de hacerlo. Jesús Rubio, egresado de la Escuela Esencial, explica que en el teatro de calle el dispositivo escénico es la calle, “yo salgo a la calle a ver qué pasa. En el teatro en la calle coloco la estructura y la coloco en la calle (Teatro Rubino) y bajo ese formato se sitúa el teatro en la calle, al aire libre. Llevamos la experiencia de la sala teatral a espacios no convencionales: plazas, parques, etc. Estamos enseñándole a las personas qué es el teatro. Bajo esta premisa se desprenden grupos de teatro con esa filosofía, de ahí nace el Teatro Esencial Sileo”.
Sileo en latín significa silencio entre el fin y el inicio, volver a comenzar. “Nosotros queremos llevar con este grupo el nuevo comienzo del teatro, el teatro visto desde otra perspectiva, en esta situación, en este tiempo que vivimos donde es necesario hacer teatro para lo que estamos viviendo no teatro de lo que estamos viviendo. Hay una necesidad de la gente de llenar el espíritu y esto es lo que nos recuerda que somos humanos: el arte”.
Eduardo Marín, su pilar
Egresado de la Escuela de Teatro Inés Laredo, Eduardo Marín tiene 28 años haciendo teatro. Su primera creación fue el Teatro Candilejas, un proyecto para la Escuela de Teatro Inés Laredo como un grupo dentro de la escuela para hacer cosas.
Luego se crea hace casi 15 años, el Teatro Esencial que cumplirá esta edad el próximo 10 de junio. “Hemos rodado primero en la Escuela de Teatro Inés Laredo, retén de Bella Vista, una casita en El Saladillo, el Jorge Washington y ahora estamos aquí en Arepa y Cacao, ya tenemos cuatro años con toda la libertad que nos ha dado el maestro José Alburguez, quien nos abrió las puertas de su fundación».
“El Teatro Esencial Sileo es un concepto, una manera de hacer las cosas. El público está en la calle, es un teatro sin paredes. Se está haciendo desde siempre y de manera ininterrumpida. A la gente le gusta mucho el ambiente que se crea cuando hay teatro. Vamos a buscar al público que no tenemos. A veces hay personas que ven teatro por primera vez. La idea final es que la gente si vaya luego al teatro”.
En el Teatro Esencial «necesitamos gente sin miedo. No es una escuela académica. Aquí el que toca la puerta, pasa. El Teatro Esencial es una fundación sin fines de lucro, las inscripciones y las clases son gratuitas. Los muchachos están en la escuela en un promedio de dos años. Todo depende del grupo, de su perfil y desenvolvimiento. Es un proceso muy complejo”.
Para Eduardo Marín, una palabra define al teatro esencial: invisible. “Lo invisible va más allá de las formas. Cada uno va a representar el contenido de su obra. Que su obra de teatro sea su propia vida y eso los hace felices».
Redes sociales
@sileoesencial
@teatro Esencial
Teatro Esencial Sileo
Escuela de Teatro Esencial.