Schumacher aún sigue en su largo sueño
Desde hace ya dos semanas los médicos decidieron empezar a bajarle la dósis de fármacos a Michael Schumacher para tratar de hacerlo despertar, pero hasta el momento no han tenido suerte.
Apenas llegado al hospital de Grenoble el 30 de diciembre, luego de sufrir el accidente de esquí que le provocó un duro golpe en la cabeza y lo dejó inconsciente, los doctores decidieron ponerlo en coma inducido para que bajara la inflamación intracraneal que presentaba.
Una vez que cedió la inflamación, se hizo el anuncio de que se le bajaría la carga de fármacos para iniciar el proceso del despertar. Se anunció que podía llevar mucho tiempo y está ocurriendo.
Según informa Ecomotor.es, citando al alemán Bild, el heptacampeón mundial de Fórmula Uno no responde a los estímulos para sacarlo del coma, más allá de algunos “reflejos puntuales”.
El artículo también expresa que Corinna, la esposa de Schumacher, se ha involucrado en el proceso, ya que le habla diariamente porque “las voces familiares tienen un efecto muy calmante en el paciente. Le dan una sensación de seguridad”, según explicó el médico alemán Heinz Peter.