El momento en el que comas, influye en la pérdida o aumento de peso
Nuestro reloj biológico y nuestros patrones de sueño regulan cómo se metaboliza la comida que comemos. Por lo que depende del momento del día si se queman grasas o carbohidratos.
El cuerpo y sus funciones tienen un ritmo. De manera común le decimos “reloj biológico”, pero su nombre científico es ritmo circadiano. Éste determina cuándo dormimos, por cuánto tiempo, cuándo tenemos hambre, la cantidad de comida que necesitamos.
Pero también existen muchos otros procesos biológicos que dependen de este ritmo. Por ejemplo: la regeneración de los tejidos intestinales y la producción de hormonas, reseñó el portal de PijamaSurf.
Entre ellas, la hormona que estimula la tiroides; el estradiol, una de las hormonas sexuales femeninas, y la melatonina, la hormona que se produce al disminuir la luz ambiental para inducir el sueño.
Sin embargo, estudios recientes postulan que hay muchas células no nerviosas que funcionan bajo ritmos circadianos. Entre ellas las células hepáticas, las cuales responden a los ciclos alimentarios.
Un estudio llevado a cabo en la Universidad de Vanderbilt en Nashville, EEUU, sugiere que la pérdida y ganancia del peso no sólo tiene que ver con la dieta y la actividad física, sino con la alteración del ritmo circadiano. Es decir, con en qué momento del día comemos ciertos alimentos.
En esta investigación, los científicos tomaron a cuatro hombres y dos mujeres de entre 51 y 63 años en buena salud física.
Los sujetos dormían y comían en una cámara metabólica y se les permitió estar fuera de la cámara durante 20 minutos, dos veces al día. Cada uno de los sujetos fue monitoreado por dos experimentos de 56 horas, en los que compararon las diferencias en el tiempo de sus comidas.
Durante las 4 comidas del día (desayuno, almuerzo, cena y aperitivo) monitorearon su tasa metabólica, la relación de intercambio respiratorio, la oxidación de carbohidratos y la oxidación de lípidos (grasas).
En el experimento en el que retrasaron el desayuno de los sujetos, y el aperitivo fue después de las 10 pm, se observó que los ritmos circadianos de oxidación de lípidos y carbohidratos se retrasaron, provocando que el metabolismo fuera más lento y que aumentara la probabilidad de que los sujetos incrementaran de peso.