Conozca estos 4 mitos relacionados con las frutas
Las frutas destacan por su alto contenido en fibra, agua, minerales, vitaminas y fitoquímicos, de alta capacidad antioxidante. Su elevado contenido en agua (a veces llegando hasta un 90%) hace que tengan muy pocas calorías.
El pequeño aporte calórico de las frutas proviene de los azúcares que contienen, que son también los responsables del característico sabor dulce de estos alimentos.
En general, todas las frutas tienen propiedades nutricionales similares, pero su composición puede variar según su tipo. Es importante mencionar que tanto frutas como hortalizas son la fuente principal de vitamina C en nuestra alimentación.
Desmontando mitos
Te presentamos cuatro mitos relacionados con el consumo de las frutas y sus beneficios en el organismo:
Mito: Es peligroso comer fruta todos los días
La respuesta es redundante: No. Las frutas se encuentran dentro del grupo de alimentos que son de consumo diario.
Al igual que con las hortalizas, el consumo diario de fruta se ha asociado a un menor riesgo de enfermedades crónicas.
De hecho, la baja ingesta de frutas y hortalizas ocasiona hasta 2,7 millones de muertes al año en todo el mundo, según indica la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Su contenido nutricional y su ausencia de sal, grasas y azúcares añadidos, son los responsables de los múltiples efectos beneficiosos que nos proporcionan las frutas. Además, “cuando comemos frutas, en el fondo lo que estamos haciendo es desplazar la ingesta de otros alimentos de indulgencia”, explicó la nutricionista Laura González.
Mito: Las frutas son peligrosas porque contienen sustancias antinutritivas
Las frutas sí contienen sustancias antinutritivas. Pero estas sustancias no suponen ningún riesgo para la salud, siempre y cuando se siga una alimentación variada y saludable y no se abuse de ningún alimento en concreto.
En la fruta destaca la presencia de ácido oxálico. Esta sustancia, que se puede encontrar en frutas como las bayas, forma unos complejos que impiden la absorción de algunos minerales como el hierro, zinc, magnesio o el calcio. Por lo que conviene no mezclar estas frutas con otros alimentos que sean fuentes de estos materiales.
Algo que sí es peligroso son las semillas de las frutas de hueso: cerezas, ciruela, melocotón, albaricoque. Estas semillas contienen unas sustancias que cuando se ingieren son altamente tóxicos.
Mito: Comer frutas solo entre horas o en ayunas evita engordar
No existe ninguna base científica que sustente esta práctica. La fruta tiene las mismas calorías independientemente del momento en que se consuma, sean en las mañanas, tarde o noche.
Laura González recuerda que la fruta ayuda a evitar picotear otros alimentos que tienen un mayor contenido calórico.
Mito: Cenar solo frutas le aporta más energía al cuerpo
Las frutas no nos aportan todos los nutrientes que necesitamos. Por lo que está práctica habitual es una manera de desequilibrar la dieta, ya que dejamos de ingerir otros alimentos importantes como la pasta, el arroz, las patatas o los huevos. Por tanto, la nutricionista Laura González no recomienda cenar solo frutas.
Fuente: EFE